Vivimos en un mundo donde lo único constante es el cambio. Y en este siglo, esos cambios llegan más rápido que nunca. Por eso, es fundamental que nuestros equipos mantengan una cultura de aprendizaje continuo. Ahora, si aún no tienes esta cultura implementada, puede que te estés preguntando: ¿Por dónde empiezo? ¡No te preocupes! En este post te voy a contar sobre una herramienta del Management 3.0 que se ajusta perfectamente a esta necesidad: la matriz de competencias de tu equipo.
Implementar esta nueva cultura no se trata solo de comprar una plataforma de e-learning o pagar por diplomados y másters. Se trata de abrir la mente de los colaboradores, guiarlos y alinear sus expectativas con los objetivos de la organización.
Primero, necesitamos planificar esta adopción cultural y existen muchas formas de hacerlo. Lo más importante es que: todo depende del propósito que tengamos. Si esta cultura de aprendizaje continuo es para por ejemplo: afrontar un nuevo reto, ofrecer un nuevo servicio, o enfrentar un nuevo proyecto; debemos adaptar nuestro enfoque. Luego de eso, es cuestión de evaluar, planear, establecer metas e implementar. Pero hoy, me enfocaré en la evaluación, que es uno de los pasos más importantes para que este cambio cultural sea exitoso.
¿Por qué es clave hacer una evaluación previa?
Esta evaluación nos ayudará a alinear expectativas y, en conjunto con el equipo, generar ideas sobre cómo implementar el plan de aprendizaje. Aquí es donde entra el “trío mágico” que es como yo lo suelo llamar, formado por:
- La organización: Nos da dirección y enfoque, respondiendo a la pregunta: «¿Qué es importante para la organización en este momento?». Podemos encontrar respuestas en su visión, los objetivos anuales o los OKRs.
- El equipo: Quien mejor que el propio equipo para conocer sus funciones, oportunidades de mejora y fortalezas. Nos ayudarán a identificar prioridades y tomar decisiones.
- Cada miembro: Involucrar a cada miembro en la evaluación los mantiene motivados y comprometidos. Además, nos dan información valiosa sobre sus intereses para su crecimiento profesional.
El poder del «trío mágico»
Con la información que recojamos de estos tres actores, nos aseguramos que el plan de aprendizaje sea relevante tanto para el crecimiento personal de cada colaborador como para el éxito de los proyectos actuales o futuros de la organización.
La Matriz de Competencias del Management 3.0
Ahora que tenemos claro el propósito, es hora de presentar la herramienta estrella: la matriz de competencias. Esta matriz nos permite visualizar y mejorar las habilidades de cada miembro del equipo. Es importante destacar que no se trata de hacer una encuesta masiva; lo ideal es trabajar con equipos pequeños (de no más de 10 personas) para que la dinámica sea efectiva.
¿Cómo funciona la matriz?
Antes de comenzar, asegúrate de que el equipo entienda los tres niveles de evaluación:
- Aprendiz (Rojo): Tiene conocimientos básicos, pero no los ha aplicado aún.
- Practicante (Amarillo): Conoce la competencia y la ha usado varias veces.
- Maestro (Verde): Es especialista en la competencia y la ha aplicado en muchas ocasiones.
Y conosca cada columna:
- Las competencias: Es el listado de competencias que el equipo necesita para desarrollar mejor sus funciones o para un nuevo reto.
- Requerido: Son las necesidades a nivel de competencia.
- La foto de cada miembro/ Nombre: Es el nivel de conocimiento que cada miembro tiene por cada competencia.
¡Ahora que el equipo ya conoce la matriz completa, es hora de empezar!
Paso 1: El equipo se reúne para definir las principales competencias que necesitan para cumplir con el propósito establecido al inicio. Esto tomará unos 15 minutos, más o menos.
Paso 2: A continuación, el equipo decide cuáles son los niveles de competencia necesarios para alcanzar ese propósito. Esta parte también puede llevar unos 15 minutos.
Paso 3: Cada miembro del equipo completa su parte de la matriz, eligiendo el color que mejor represente su nivel actual en cada competencia. Esto se hace en aproximadamente 10 minutos.
Paso 4: Finalmente, el equipo reflexiona en conjunto sobre si las competencias actuales cumplen con las necesidades planteadas.
Este ejercicio nos da un panorama claro de dónde estamos y hacia dónde debemos ir.
¿Y después qué?
Con la matriz completa, cada miembro del equipo puede decidir en qué competencias necesitan mejorar y qué tipo de capacitación o formación sería más útil. Esto nos permite:
- Planificar entrenamientos personalizados, para fomentar la cultura de aprendizaje continuo.
- Elegir la mejor plataforma de e-learning para nuestras necesidades.
- Cerrar las brechas de competencias antes de iniciar proyectos desafiantes.
Recuerda, la creatividad es clave para encontrar las mejores soluciones a las necesidades que surjan de esta matriz. ¡Las posibilidades son infinitas!. Si tienes alguna pregunta o quieres compartir tus ideas, ¡no dudes en hacerlo!
